Los detuvieron por atentado al pudor.
Y nadie les creyó cuando el hombre y la mujer trataron de explicarse.
En realidad, su amor no era sencillo.
Él padecía claustrofobia, y ella, agorafobia.
Era sólo por eso que fornicaban en los umbrales.
Mario Benedetti
3 comments:
Oí alguna vez decir que el placer verdadero es el que sienten dos sumisos del destino, de esos que se encuentran solo 1 vez en sus vidas y por poco tiempo, cuando hacen el amor.
Hasta los que padecen fobias de ese tipo se subordinan al amor....
chancha ojala estes mejor, sin tener el alma remojada en alcohol. me agregaste a tu pagina! tendre mas amigos! jajajaja, pero porfas, pon bien mi direccion xq no se puede entrar, lo mismo q nada :( buuuu
abrazote,
Ic
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